La meta era simple, tener una experiencia culturar distinta en el primer mundo, y construir una vida mejor… de la que ya teníamos en Colombia, que de por sí era muy buena.
Tuve la fortuna de poderme tomar al menos seis meses de gabela antes de empezar a buscar trabajo gracias a que en esa época todavía recibía ingresos por concepto de los libretos que escribía para Mujeres al Límite.
Durante ese tiempo mi prioridad fue aclimatarme, mejorar mi nivel de inglés, conocer la ciudad de Halifax y aprender a moverme en ella. Finalizado el periodo de gracia, la búsqueda de empleo empezó, y con ella, 5 lecciones que aprendí en el proceso:
- Uno no… simplemente manda la hoja de vida.
Eso es lo fácil, pero postularse a un empleo significa ir más allá y crear un perfil altamente deseable para el potencial empleador y para eso, nada mejor que escribir una buena carta de presentación que cuente una historia, en la que uno es el protagonista… el mejor, y más vale que sea una buena.
- El título universitario no suena tanto como los cargos que has ocupado o las empresas en las que has trabajado
Así que mejor deja el diploma universitario colgado en la sala de la casa de tus padres, que si son como los míos, seguramente obtendrán mucho más placer exhibiéndolo frente a sus amigos que tú mismo tratando de mostrárselo a potenciales empleadores aquí en Canadá.
Y no es que no les interese la educación de sus candidatos inmigrantes pero, en general, los empleadores canadienses no conocen las universidades ni la estructura curricular de las carreras en nuestros países; así que, a falta de este punto de referencia, ellos se fijan en la experiencia laboral, concretamente en los cargos ocupados, las empresas en las que hemos trabajado -especialmente si son conocidas en el sector- y las descripciones de los roles.
- Cada entrevista que hagas es también una oportunidad para hacer nuevos contactos
Obviamente el objetivo principal de ser llamado a entrevista es conseguir el empleo pero nunca está de más aprovechar la oportunidad para agregar un nuevo contacto a tu libreta de teléfonos o tu perfil de Linkedin.
- Tú también puedes hacer preguntas en la entrevista!
Este fue quizá mi mayor shock al presentar entrevistas aquí en Canadá. Yo nunca había tenido el privilegio de hacerlo en Colombia en donde, las preguntas son generalmente para el candidato.
Aquí entendí que la entrevista no es solamente para que te conozcan si no para que tú también conozcas la empresa y te hagas una idea más clara del cargo al que estás aspirando.
- Ser puntual muchas veces es más importante que llegar bien preparado
No importa cuántas veces hayas practicado la entrevista, si llegas tarde, entraste con el pie equivocado.
Mi lista de aprendizajes podría seguir hasta el infinito pero a la chismosa que hay en mí le interesa más saber de ustedes. Cuéntenme, ¿Cuáles han sido sus aprendizajes presentando entrevistas? Cómo los han aprovechado para mejorar su perfil?